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GoodMills

El productor de harina líder en Austria digitaliza su producción

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Sector: Panadería y horneados
 

La digitalización también crea nuevas oportunidades para que las pymes optimicen sus procesos y se vuelvan aún más eficientes. Un vistazo al nuevo centro logístico de GoodMills en Austria lo demuestra. El software central es el sistema ERP de CSB. 

Cuando la harina terminada en la planta de GoodMills en Schwechat inicia su viaje hacia el cliente, ésta ha pasado ya por varias estaciones: molido, embotellado, entrada y salida de almacén, y por último, carga en el camión. Todo el proceso fluye de forma altamente automatizada, ya que con el software de CSB GoodMills ha conectado en gran medida la producción, la logística y los socios comerciales. "Nosotros gestionamos la gestión de mercancías, los procesos logísticos y los ámbitos de servicios como la contabilidad con el CSB-System. No tenemos soluciones aisladas, todos los empleados trabajan con el mismo software. Mientras tanto, la integración ha progresado tanto que también controlamos nuestras máquinas e instalaciones con el software.“, afirma el gerente Gregor Trieb.

El proceso: Una vez que los diferentes tipos de harinas se envasan en paquetes o sacos pequeños, se transportan a través de cintas transportadoras hasta los siguientes pasos del proceso. Cada envase individual se etiqueta, escanea, y por lo tanto, se registra en el sistema informático sin necesidad de intervención manual de un empleado. Después de un breve recorrido por la cinta transportadora, los envases llegan a la paletizadora automática, dónde se apilan en palets conforme a patrones predeterminados. Por último, los palets terminados son envueltos, marcados con etiquetas de palet y conducidos automáticamente a la zona de almacenamiento por medio de vías de rodillos.

30 palets por hora

"En comparación con años anteriores, el rendimiento en toda la gestión de pedidos técnica, desde el embotellado hasta el almacenamiento de nuestros productos, ha aumentado considerablemente. Realizamos hasta 30 palets por hora", expone Trieb.

Esta capacidad de rendimiento se debe a que las máquinas, las instalaciones y los robots intercambian datos en tiempo real con el software ERP utilizado a través de aplicaciones MES. Por ejemplo, las instalaciones de paletizado y bobinado seleccionan los programas adecuados para cada grupo de productos basándose en los datos maestros de artículos del CSB-System. Las etiquetadoras también están conectadas al software y reciben automáticamente todos los datos relevantes, tales como el número de artículo, el número de unidades de pedido, el número de lote, la fecha de producción y caducidad, así como el número de unidad de envío para garantizar una trazabilidad inequívoca de los productos.

Mayor flexibilidad para los clientes 

También ha aumentado la flexibilidad con respecto a las exigencias de los clientes. Los minoristas, por ejemplo, encargan los llamados palets tipo Düsseldorf, es decir, la mitad de los palets Europool que se utilizan para la presentación de mercancías. En primer lugar, estos son envueltos y etiquetados individualmente. A continuación, se registran automáticamente por pares y se disponen de nuevo frente al enrollador, de modo que se pueden envolver juntos y equipar con una etiqueta de palet común. "Hoy en día podemos satisfacer los deseos del mercado y de nuestros clientes de un modo mucho más flexible, ya que somos capaces de procesar los más diversos tipos de palets de forma eficiente y económica", afirma Trieb.

Mínimo esfuerzo de disposición

GoodMills también ha digitalizado los procesos en la disposición de rutas. El intercambio de información con los transportistas ya no se realiza por teléfono, sino a través de un portal web. Allí, los transportistas se registran aquí, distribuyen entre sus vehículos los pedidos designados para ellos y eligen una hora de carga aún libre. Poco antes de la llegada del camión, los pedidos se agrupan y se colocan en la rampa. Una vez en la ciudad de Schwechat, el conductor recibe primero la lista de carga para la ruta, y a continuación se abre la puerta de carga correspondiente. Las vías de rodillos instaladas en el suelo se desbloquean y cierran mediante sistema informático, lo que garantiza que los transportistas no carguen artículos erróneos. Por último, se imprimen los documentos de entrega y se contabilizan las cantidades de suministro. "El esfuerzo de comunicación con nuestros transportistas se ha reducido actualmente al mínimo. Además, ya no existe una distribución temporal desigual de los camiones en nuestras instalaciones, y los transportistas no tienen que soportar más tiempo de espera. Sabemos exactamente cuándo llega qué transportista y qué mercancía debemos preparar a qué hora en qué rampa. "

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